
Una vez empieza el concierto podemos ver la parte más humana del artista, evocando las motivaciones que le llevaron a escribir ciertas canciones. Habla sobre su padre, muerto dos meses antes, y le dedica la película, tal como se puede comprobar al final de la misma con ese for daddy impreso en la pantalla. El concierto es acústico, así que los que esperen ver al Neil Young más feroz espero que no se lleven una decepción. Con el acompañamiento de músicos --y amigos-- tales como Emmylou Harris, Ben Keith o la misma esposa de Neil, Pegi Young, el canadiense nos acerca su disco Prairie Wind íntegro. La segunda parte es un séquito de clásicos del artista, aunque eché en falta algunos temas, sobre todo esa My, My, Hey, Hey (Out Of The Blue)...
Imprescindible para los fans de Neil Young y de la buena música. Un concierto relajante, nostálgico, emotivo y carismático. Aunque para algunos Neil Young sea de otro planeta en el final del filme podemos ver que no es muy distinto a otros: solo en el escenario, con el auditorio vacío y tocando con su guitarra. Cuando termina la guarda, se levanta, mira dándonos la espalda y se va. Conozco a una persona que me dijo que si pudiera volver a nacer le gustaría ser Neil Young... Hay razones para decirlo.
Siempre le he dicho a mi pareja que realmente, formamos un trío: ella, yo y el viejo Young.
ResponderEliminarPara nuestra desgracia, en Bilbao parace que ningún exhibidor ha considerado de interés la palícula.
Pues habrá que viajar a Francia, como hace tantos años...
Un saludo.
He tardado un tiempo en ver esta película; como aquel niño que va dejando la parte favorita de un plato para el final. Una verdadera joya. Nada relevante que añadir a tu reseña. Tal vez, solamente, que si Neil siempre ha sido alguien a quien se ama entrañablemente, esta película consigue despertar aun más la admiración y el afecto por su arte y su personalidad.
ResponderEliminarSalut!
JLL
Grata tu visita por aquí, amigo JLL. La verdad es que me enorgullece leer tu primer comentario en esta humilde morada, un comentario que denota el largo camino musical del opinante. Y que conste, opinar sobre Neil Young no es fácil, pues estamos hablando de uno de los más grandes. Creo que todo el mundo lo tiene claro menos él, persona humilde entre humildes.
ResponderEliminarSólo decirte una cosa: Keep on rokin' in the free world!
Viendo esta pelicula, y seguidamente "Year Of The Horse" the Jim Jarmush uno se puede hacer una idea de las dos principales facetas del viejo bufalo canadiense.
ResponderEliminarMe siento muy afortunado de poder verle por fin en directo, el 14 de Marzo, en Londres.
Un saludo
Luis,
ResponderEliminarFelicidades, ver al Tito Neil seguro que será una gran experiencia. Yo también le veré en Londres, pero el dia 6 de marzo. No veas las ganas que tengo...!
Sencillamente...ese final con el Old Laughing Lady fue lo mejor.
ResponderEliminarYo lo pille en el Esparrago del 91. Grandiosa su Powderfinger.